jueves, 17 de diciembre de 2009

INTRODUCCIÓN Y RECORRIDO POR EL CERRO

El cerro de la Cantueña es un cerro testigo situado en la Fosa Tectónica del Tajo y en concreto en la Cuenca de Madrid. Se encuentra al norte de la ciudad de Parla y contiguo a ella. Rodeado de vías de comunicación, polígonos industriales y zonas urbanizadas es en parte una isla natural en esta zona del sur del Madrid. Perteneciente a los términos municipales de Fuenlabrada, Parla y Pinto fue declarado por la Comunidad de Madrid como ¨area de interés arqueológico". Conserva numerosos valores naturales: botánicos, zoológicos, geológicos siendo también una muestra del pasado rural y agrícola de Parla. Puede realizarse un recorrido fotográfico por dicho cerro en la presentación contígua en la que se aprecian sus numerosos valores naturales y paisajísticos.


LAS ROCAS DE LA CANTUEÑA

El cerro de la Cantueña se halla constituido por materiales sedimentarios estratificados horizontamlmente. La mayor parte son de origen detrítico (arenas y arcillas), excepto en la zona superior que se encuentra un estrato de caliza, de origen químico, con numerosos nódulos de sílex.
















La figura 1 se corresponde con las arcosas; la figura 2 con las calizas; la figura 3 con el sílex y la figura 4 con un escarpe en donde quedan visibles los anteriores tipos de rocas y en donde se ha producido un desprendimiento de calizas.

LAS ARCOSAS

Son los materiales predominantes en el Cerro de la Cantueña. Son un tipo de rocas sedimentarias detríticas y en concreto de areniscas. Megías y col. (1983)* las definenen como sedimentos terrígenos en los que el cuarzo y el feldespato son los minerales mayoritarios, procedentes de la erosión de un área granítico-neissica. En la Cuenca de Madrid las arcosas tienen su origen en los materiales plutónicos (granitos) y metamórficos (neises pricipalmente) que forman la Sierra de Guadarrama. Estos materiales erosionados fueron tranportados hacia la fosa del Tajo por cursos de agua de carácter torrencial que formaron abanicos aluviales (fotografía inferior). Los abanicos aluviales son formaciones sedimentarias que se producen cuando existe un gran desnivel, en este caso entre la Sierra de Guadarrama y la fosa del Tajo que se extendería, como actualmente, hacia el sur de la primera.

Los cursos de agua, con origen en la Sierra, se encauzarían por valles angostos que al salir hacia la llanura dispersarían los sedimentos en una amplia zona. Distintos abanicos aluviales se irían anastomosando ocasionando todos los sedimentos detríticos que se observan actualmente paralelos a la Sierra de Madrid. Las variaciones climáticas originarían cambios en los flujos de agua determinando depósitos de materiales con distinta granoselección. En la primera fotografía puede verse el tamaño distinto de los granos de las arcosas.

Ver entrada de "abanicos aluviales" en este blog.


*Megías, A.G., Ordóñez;s. y Calvo, J.P. (1983). Nuevas aportaciones al conocimiento geológico de la Cuenca de Madrid. Rev. Mat. Proc. Geol. (1) 163-191.

viernes, 11 de diciembre de 2009

ABANICOS ALUVIALES




Losabanicos aluviales son formaciones sedimentarias que se ocasionan por el depósito de materiales detríticos (cantos, gravas, arenas, limos, arcillas) por cursos fluviales que sufren una disminución brusca de la pendiente depositando todos los materiales que llevaban en una ámplia zona en forma de abanico. La disminución brusca de pendiente puede ser debida por el paso de una zona montañosa a la llanura o por la existencia de una falla que establece un escalón en el terreno.



La Cantueña está formada sobre los materiales de abanicos aluviales que se formaron hace unos 10 a 15 millones de años. Se debieron al levantamiento, por la orogenia alpina, de la Sierra del Guadarrama y al hundimiento de los terrenos al sur, qur formaron la Fosa del Tajo. Este desnivel ocasionó cursos fluviales en la Sierra que al desembocar en la llanura depositaban todos sus materiales. Posteriormente sobre ellos se modeló el actual paisaje. Como puede verse en la siguiente fotografía, los abanicos pueden alcanzar una gran extensión. En la zona que nos ocupa, abanicos que surgían a lo largo de toda la sierra fueron superponiéndose unos a otros, originando una banda de depósitos detríticos al pie de la Sierra. Más allá el agua se acumuló formando lagunas en las que los depósitos fueron de tipo químico o biológico dando lugar a otro tipo de materiales como evaporitas (yesos, halita, etc), calizas y sílex.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

LAS CALIZAS



Las calizas son rocas sedimentarias formadas por la precipitación del carbonato cálcico. Esta precipitación puede tener un origen químico o bien biológico. En el siguiente enlace pueden verse ejemplos de diferentes tipos de calizas.

En el Cerro de la Cantueña son observables en la parte superior. En el mapa geológico de Getafe del IGME (1975) son definidas como calizas impuras presentando numerosos nódulos de sílex, y pudiéndose observar en otros cerro del entorno (MONTES y col., 2006*). No se aprecian prácticamente fósiles y se formaron en un ambiente continental, en concreto en lagos de poca profundidad. CALVO y col., **(1984) describen las calizas con sílex que aparecen en el Cerro Mirones, situados más al norte y similares a las de la Cantueña como: "calizas de tonos blancos o beiges y muy compactas por efecto de la silicificación asociada. La estructura interna viene definida por laminación parelela fina y presentando intercalaciones margosas. La silicificación afecta dando lugar a nódulos de tamaño variable o bien en forma homogénea (diseminada)". Es decir, el depósito de sílex que se produjo simultáneamente al de las calizas, además de producir los nódulos, ocasionó una cierta compactación (endurecimiento), menor en el caso de las calizas de la Cantueña. Unas calizas similares, aunque con mayor calidad para su utilización en la construcción, son las calizas de Colmenar de Oreja que se describen en el anterior enlace que corresponde a un itinerario geológico. Estas son posteriores a las de la Cantueña. En este otro enlace se encuentra el mismo recorrido geológico por el sureste de Madrid con algo más de información.

La formación de las calizas de la Cantueña obedeció a fenómenos químicos precipitando el carbonato cálcico a partir del bicarbonato cálcico disuelto en el agua. Como las calizas son más compactas y resistentes a la erosión que las arcosas, han sido las responsables de los escarpes que se observan en algunas zonas altas del cerro, como puede verse en la fotografía 4 de la siguiente composición. Escarpe en el que se ha producido un desprendimiento de calizas (fotografía 2). En la 1 y 3 los otros materiales del cerro, arcosas y sílex, respectivamente.



*Montes, M., Beamud F., Garcés, M. y Calvo, J.P. (2006). Magnetoestratigrafía de las unidades inferior e intermedia del Mioceno de la Cuenca de Madrid. Revista de la Sociedad Geológica de España. 19 (3-4): 281-298.

**Calvo, J.P., Ordóñez, S., Hoyos, M. y García del Cura, M.A. (1984). Caracterización sedimentológica de la unidad intermedia del Mioceno de la zona sur de Madrid. Rev. Mat. Proc. Geol. II 145-176.

viernes, 4 de diciembre de 2009

EL SÍLEX



Acompaña a las calizas en forma de nódulos de sílex (CALVO y col., 1984*). El sílex es una roca dura de grano fino, amarillo claro, pardo a negro, de fractura lisa y concoidea y de brillo vítreo; los fragmentos son de bordes agudos y translúcidos. El límite con la caliza está bien determinado y los nódulos se separan, a veces, fácilmente. En la Comunidad de Madrid el sílex aparece en numerosos lugares, formando nódulos asociados a distintos tipos de rocas sedimentarias.

El origen del sílex puede ser químico, por precipitación de sílice disuelta o biológico a partir de organismos microscópicos con caparazón silíceo, que al morir se depositan en el fondo de lagos y lagunas. Posteriormente por los cambios diagenéticos que sufre el sedimento se acumulan, formando los nódulos.

Por su mayor resistencia, a medida que la caliza se va meteorizando y erosionando, los nódulos de sílex van desprendiéndose, quedando sueltos y esparcidos por el terreno. En la meseta del Cerro de la Cantueña se aprecian multitud de cantos de sílex así como en las laderas.
Características del sílex















Figura 1 arcosas; figura 2 calizas; figura 3 fragmento de sílex separado de la caliza; figura 4 escarpe con desprendimiento de calizas.

*Calvo, J.P., Ordóñez, J.P., Hoyos, S., y García del Cura, M.A. (1984). Caracterización sedimentológica de la unidad intermedia del Mioceno de la zona sur de Madrid. Rev. Mat. Proc. Geol. II 145-176.